«No sólo no reaccionaban cuando nos llamaban ´puta´ a un palmo de la cara, es que a mí me mandaron callar cuando le respondí a uno»

«Eso, llevaros a esa perra entre los dos, la violáis y la tiráis a una cuneta». Esa barbaridad se escuchó en València el pasado 9 d´Octubre, alrededor de las 18.30 horas, todavía con el sol fuera y miles de personas en la calle, también niños, muchos niños. La violencia, si es contra mujeres, dos veces violencia.

«Las hostias son lo de menos; sentí que, si querían, podían violarme allí mismo», cuentan dos agredidas en la manifestación del 9 d’Octubre

Las agresiones de hace una semana no fueron solo físicas. Un grupo de ultras golpeó y pateó a varios asistentes de la marcha reivindicativa, convocada por la Comissió 9 d´Octubre y que este año llevaba como lema «Sí al valencià». Pero otra amalgama, mucho más amplia, se pasó todo el recorrido insultando y violentando verbalmente a centenares de mujeres que participaban en la misma manifestación. Hora y media de acoso específico no por ser independentista, o nacionalista, o de izquierdas, sino por ser mujer. Por los primeros hechos ya se han conocido detenciones, por los segundos no.

«Las caras de odio no se me van a olvidar nunca», cuenta Altea (nombre ficticio). Ni ella ni Marta quieren dar sus nombres reales, tienen miedo. Ha pasado casi una semana pero todavía es muy vívido el recuerdo de lo sufrieron durante el 9 d´Octubre. Altea retiene en concreto a cuatro hombres: uno con una camiseta rosa, que la llamó «fea», «gorda» y «golfa»; un segundo que le hizo «un calvo», se bajó los pantalones y le enseñó sus partes íntimas; un tercero, «un señor mayor, con un polo morado y mochila, que me llamó varias veces zorra»; y un cuarto que insistió en comentar su aspecto físico y su peso.

Marta narra el tremendo esfuerzo que tuvo que hacer para abstraerse. «Tápate, que como te enganchemos fuera te vas a enterar», le dijeron, al tiempo que ella se reajustaba la braga que cubría su rostro. «Por la noche no podía ni dormir», explica.

«Todo eran amenazas de agresiones sexuales, caras de odio, asco, incluso morbo. Les veías odiando y disfrutando a la vez», narra esta joven de 20 años. Iba acompañada de su novio, pero eso no supuso ningún inconveniente para los agresores. «Cuando les miraba yo, me aguantaban la mirada. Si les miraba mi novio, paraban de gritar y desviaban la atención a otro sitio», cuenta.

Uno de los hechos que más les impactó a ambas fue la actuación de «lo que parecen ciudadanos ejemplares. Padres de familia con sus hijos. Vecinos que te podrías cruzar en el ascensor, llamándote puta y guarra en plena calle», lamentan. También los insultos de mujeres. «La misoginia no tiene límites. Mujeres insultando a otras mujeres, no lo puedo entender. Incluso vi a una señora cómo aplaudía a su marido mientras él me decía ´tápate la cara que eres más fea que mi culo´», detallan. «Los fascistas ya sabes cómo son y cómo actúan. Esto eran señoras, incluso algunas pijas, que se les llenaba la boca con insultos», critican.

«Lo peor no fueron las agresiones, fue la humillación como mujer. Ese paseíllo de la vergüenza que permitió la policía. Nosotros por el medio y a ambos lados, insultos», apunta Marta, nada más empezar su relato. «Las hostias son lo de menos. Si te pegan, te defiendes como puedes. Pero ese día sentí que si querían, me podían violar allí mismo», describe la joven. «No me da miedo una paliza, mi mayor miedo es que me violen», añade Altea. Con ese temor es con el que circulan miles de mujeres cada día. «Nos lo inculcan desde pequeñas, que no vayamos solas a los sitios, que es peligroso. Y es verdad. Continúa siendo verdad», censuran.

«Voy a seguir saliendo y haciendo mi vida, pero el miedo no se va», cuenta Marta. «Es un problema educacional, hace falta más feminismo», añade. «Hace falta feminismo, a secas», apostilla Altea. «Parecían enfermos mentales, pero no lo son. Son hijos sanos del patriarcado», zanja Marta.

«Los agentes no reaccionaban a las agresiones verbales»
Para las jóvenes, es necesario que el cuerpo de policía se forme más en cuestión de género. «¿Como se sintieron las mujeres policías?», se preguntan. «No sólo no reaccionaban cuando nos llamaban ´puta´ a un palmo de la cara, es que a mí me mandaron callar cuando le respondí a uno».


Fuente: Levante

7 comentarios

  1. Estos son los intelectuales explicando con gestos amables lo que es el independentismo,sobre todo el de la camiseta con la senyera,este es el mas intelectual de todos,en fin este es el nivel de la gente,que pide que se le reconozca su identidad ,no tan solo este Valenciano buena persona y pacifico,si no tambien los Catalanes y los Españoles con banderas con el aguilucho al viento,menos mal que son los menos.Luego estamos nosotros,gente normal que tenemos menos estudios,y mas violentos,nosotros los ciudadanos que en una manifestacion andamos en silencio y sin alzar la voz,por eso bienen los otros intelectuales con sus porras y sus pelotas de goma para decirnos amablemente que nos dispersemos…Niños y niñas,esto es lo que comunicarian,tanto el gobierno de Cataluña´´´mierdas y cobardes´´ý el gobierno Español´´mas mierda y mas cobarde todavia,el primero por escudarse detras de sus ciudadanos,pues ellos son los que se llevan los golpes de la guardia civil y de la policia nacional,mientras ellos estan sentados y protegidos en sus despachos por los mozos de escuadra,el segundo por que ah tenido siete años para dialogar y pactar una salida legal para hacer un referendum con garantias democraticas y acorde ah la constitucion,pero no,el inutil de Rajoy facha Brey prefirio callarse y actuar como siempre, ´´esto es sin hacer nada´´escudandose detras de los jueces y fiscales´´vendidos y afines ah su partido´´y mandando ah la policia ah represaliar ah los ciudadanos y ah las ciudadanas que salieron ah votar lo que creian justo y por derecho,su identidad nacional y autodeterminacion,ilegal si,pero por la dejadez y la cobardia de este gobierno el Español,el mas corrupto de todos desde que se restauro la ´´democracia´´.En fin,niños y niñas espero que os haya aclarado alguna cosa.Ciao.

  2. Yo creo que habrá que denunciar la violencia, sea independentista, que la hubo, como aquí, que la habrá habido, ahora bien, todo bien investigado, pq en las redes todo se desvirtúa. Aparte no estoy a favor de eso de que si la violencia es contra una mujer es dos veces violencia, es que si apalean a un hombre o lo violan es menos que una mujer?? También es constitución que no habrá discriminación por razón de sexo así que vamos a empezar a ser iguales hombres y mujeres vale?

  3. Imagino por lo que estás pasando, esa gentuza da miedo, no están bien consigo mismos, descargan su odio y sus frustraciones con los demás. Una buena dosis de lo que ellos dan, y se calmarían. Enfin…
    Olvida los insultos. Solo ofende quien puede, un insulto viniendo de semejante basura no te tiene que afectar.

  4. Luego resulta que los que «adoctrina» son las escuelas de catalunya al odio contra estas hienas salvajes, asesinas, delictivas. Perdonar «Altea» y «Marta» pero eso no son personas normales. Su odio me repugna tanto que no encuentro adjetivo para esta calaña de carroñeros. Desde aqui, recibir todo mi apoyo y mi fuerza.
    No les puede desear el mal, pero ……

  5. Este País se ha convertido en la Ciudad sin Ley,cuando no se hace nada contra esta gentuza,llegará un momento que las mujeres jóvenes no podrán salir solas a la calle,como en los Países árabes…

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