Inician la exhumación de cerca de 100 fusilados de una fosa común de Paterna

Los trabajos de excavación y exhumación de la fosa 112 del cementerio de Paterna (Valencia), donde se espera encontrar dos sacas con cincuenta cuerpos cada una de fusilados durante la represión franquista, han dado comienzo este lunes.


Los cuerpos proceden en su gran mayoría de las comarcas de La Safor y Ribera y de numerosas localidades de la provincia de Valencia, como Tavernes de la Valldigna, Cullera, Albalat, Sollana, Carlet, Villanueva de Castelló, l’Alcúdia, Manises, Torrent, Paterna, Puçol, Silla, Oliva, Sagunt, Sueca, Alberic, Alcàsser, Alginet, Alaquàs, Benifaió y Beniparrell, según un comunicado de la Diputación de Valencia.

Las obras, financiadas por la Diputación de València, son una más de las actuaciones en materia de memoria histórica que se están llevando a cabo durante 2018, con un presupuesto de 626.000 euros.

En el inicio de esta actuación, han estado presentes la diputada provincial de Memoria Histórica, Rosa Pérez Garijo, y el diputado de Cultura, Xavi Rius, así como la presidenta de la Asociación de Familiares Víctimas del Franquismo de la Fosa 112, Carmen Gómez, nieta del alcalde republicano de Tavernes que podría hallarse entre los cuerpos en dicha fosa.


Tal como ha recordado Pérez Garijo, «la Diputación es la primera y de momento la única administración pública que está financiando la exhumación de fosas porque es una prioridad política del gobierno provincial». «Esta es la novena fosa que vamos a abrir desde que empezó la legislatura y esperamos llegar a exhumar de un 15 a un 20 % de las fosas comunes de este cementerio», ha agregado.

En concreto, en la fosa común 112, situada en el primer cuadrante del cementerio paternero, se encuentran enterrados represaliados del franquismo fusilados tras las sacas del 30 de noviembre de 1939 -50 fusilados- y del 8 de diciembre de ese mismo año -otros 50-, con lo que el equipo de arqueólogos espera exhumar cerca de un centenar de cuerpos, entre ellos, el de Vicente Gómez Marí, alcalde republicano de Tavernes de la Valldigna. Ha sido precisamente este consistorio de la comarca de La Safor el que ha impulsado el proceso de excavación, ya adjudicado por más de 95.700 euros, de los cuales la Corporación provincial ha aportado, por medio de una subvención, 89.719 euros.

Los trabajos de excavación y exhumación de la fosa común, a cargo del equipo de ArqueoAntro, que dirige el arqueólogo Miguel Mezquida, se prolongarán durante los próximos dos meses. En una semanas esperan «llegar a los restos de los represaliados» y después iniciar «el proceso de delimitación de la fosa y el comienzo de exhumaciones», ha explicado Mezquida.


Una vez finalizados los trabajos de campo, se enviarán las muestras a la Escuela de Medicina Legal de la Universidad Complutense de Madrid, donde se estudian los restos exhumados y, tras este proceso, una empresa genética hará los análisis de las muestras de ADN de las familias involucradas en el proceso.Estos análisis, junto con los estudios arqueológicos y antropológicos, permitirán la individualización e identificación completa de los restos de las víctimas que después serán devueltas a sus parientes, en un plazo máximo de dos años.



Fuente: Público