La comunidad italiana se indigna por la presencia de la nieta de Mussolini y el líder de Forza Nuova, relacionado con los atentados de Bolonia

Los italianos residentes en Valencia han criticado la celebración de la cumbre. «Es una vergüenza que vengan aquí a hacer apología del fascismo. En Italia eso es delito», explicaron desde la asociación Espai Italia. Junto con el Grupo de Recuperación de la Memoria Histórica van a celebrar un acto de repulsa el mismo sábado 21, en el que acudirán al Cementerio General de Valencia a colocar una placa en conmemoración de las víctimas de los bombardeos que ordenó Mussolini sobre Valencia

maxresdefaultLa celebración de una cumbre europea fascista el próximo día 21 en la ciudad de Valencia ha suscitado inquietud e indignación entre organizaciones como Movimiento contra la Intolerancia, quien ha pedido a la Fiscalía de Delitos de Odio y Discriminación que actúe de oficio y tome medidas cautelares para evitar que el encuentro se convierta en un acto de apología o incitación a la discriminación y al odio.

«La fiscalía debería tomar medidas de prevención e intervención en el caso de que sea necesario», explicaron a Levante-EMV fuentes del movimiento.

«Esta cumbre responde a un proceso de expansión neofascista que se está viviendo en Europa y es muy preocupante», añadieron desde la entidad. «La legislación española tiene que seguir las directrices contra el racismo y xenofobia de la Unión Europea para evitar que se puedan cometer ilegalidades», detallaron.

El encuentro, del que informó ayer este periódico en exclusiva, pretende congregar a unos 200 asistentes. Edda Negri Mussolini, que acaba de publicar un libro de las memorias de su abuela Rachele, esposa del Duce, hablará de la vida del dictador italiano junto a la periodista que le ha ayudado a escribir el relato. También estará presente el líder de Forza Nuova Roberto Fiore, condenado por pertenencia a grupo armado, relacionado con los atentados de la estación de Bolonia de 1980 y exiliado en Londres durante dos décadas hasta que prescribieron los delitos de los que se le acusaba.

Fiore compró junto Massimo Morsello (también acusado en la masacre boloñesa) varias casas en Los Pedriches, una aldea abandonada cerca de Utiel. La idea era montar un santuario neofascista.

Pedro Varela, propietario de la librería Europa de Barcelona condenado por difusión de ideas genocidas y por atentar contra derechos fundamentales y libertades públicas, participará asimismo en la jornada.

«No hay preocupación» Con este cartel el encuentro se ha convertido en una reunión «de referencia» para el neofascismo europeo, sostienen tanto sus organizadores como sus detractores.

Ante este panorama, fuentes de la Delegación del Gobierno de la Comunitat Valenciana señalaron que están «pendientes» del desarrollo de los acontecimientos. De hecho, ayer mismo, el delegado Juan Carlos Moragues, pudo hablar de la cumbre, entre otros asuntos, con el Secretario de Estado de Seguridad, presente en Valencia. La jornada fascista a priori no requiere de un permiso específico al no celebrarse en un espacio público, precisaron.

Los italianos residentes en Valencia han criticado la celebración de la cumbre. «Es una vergüenza que vengan aquí a hacer apología del fascismo. En Italia eso es delito», explicaron desde la asociación Espai Italia. Junto con el Grupo de Recuperación de la Memoria Histórica van a celebrar un acto de repulsa el mismo sábado 21, en el que acudirán al Cementerio General de Valencia a colocar una placa en conmemoración de las víctimas de los bombardeos que ordenó Mussolini sobre Valencia

Fuente: levante